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La FIA evalúa limitar las radios en la F1

La Federación Internacional del Automóvil (FIA) está evaluando nuevas restricciones en las comunicaciones radiales de los equipos durante los fines de semana de carrera en la Fórmula 1. La propuesta se alinea con las recientes medidas adoptadas por el organismo para endurecer el control del lenguaje utilizado por los pilotos en espacios oficiales, como ruedas de prensa. La idea ha sido planteada por el presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, quien dejó entrever la posibilidad de limitar o retrasar la emisión de mensajes radiales en vivo. Sin embargo, cualquier cambio en este ámbito chocaría con los intereses de la Fórmula One Management (FOM), entidad responsable de la retransmisión del campeonato.

En los últimos meses, la FIA ha tomado una postura más estricta respecto al comportamiento verbal de los pilotos. Casos como el de Max Verstappen, sancionado por comentarios durante una conferencia de prensa, o el de Yuki Tsunoda, multado por expresarse de manera inapropiada en el pit lane, reflejan el endurecimiento de las normativas. A pesar de la resistencia de los pilotos, quienes han solicitado mayor flexibilidad mediante una carta enviada a la FIA, la publicación del nuevo reglamento en invierno dejó en claro que el organismo rector no tiene intención de suavizar las sanciones. De hecho, el documento contempla la posibilidad de aplicar multas económicas más elevadas e incluso restar puntos en la clasificación a quienes incumplan las normas de conducta.

Hasta el momento, la regulación se ha centrado en eventos organizados directamente por la FIA, como las ruedas de prensa. No obstante, la reciente sugerencia de intervenir en las radios de los equipos ampliaría el alcance de estas restricciones. Durante un evento en el circuito español del Jarama, Ben Sulayem mencionó que se están considerando opciones como retrasar la transmisión de los mensajes o incluso bloquear ciertas comunicaciones en vivo. La implementación de estas medidas supondría un desafío, ya que los equipos utilizan las radios no solo para gestionar estrategias de carrera, sino también para responder a situaciones imprevistas en la pista. Además, en momentos de alta tensión, los pilotos difícilmente moderan su lenguaje, lo que podría generar aún más conflictos con la Asociación de Pilotos de Grandes Premios (GPDA).

Por otro lado, cualquier modificación en la emisión de las comunicaciones radiales tendría que negociarse con la FOM, propietaria de los derechos de transmisión de la Fórmula 1. En la actualidad, la FOM ya ejerce cierto control sobre los mensajes que se emiten al público. En plataformas como F1TV, algunos audios son censurados o recortados, y la señal cuenta con un pequeño retraso que permite filtrar contenidos antes de ser transmitidos. No obstante, parte del atractivo de las retransmisiones radica en la tensión que generan las conversaciones en radio, muchas veces editadas o sacadas de contexto para añadir dramatismo a las carreras. Si la FIA impone restricciones adicionales, esto podría afectar la narrativa que la FOM construye en sus emisiones.

El debate sobre el control del lenguaje en la Fórmula 1 sigue abierto, y la posibilidad de limitar la radio de los equipos añade un nuevo punto de conflicto entre la FIA, la FOM y los propios pilotos. Por ahora, la propuesta aún está en fase de evaluación, pero cualquier decisión en este sentido deberá ser acordada con todas las partes involucradas. Mientras tanto, la Federación continúa aplicando su política de tolerancia cero hacia el uso de lenguaje inapropiado, dejando claro que no dará marcha atrás en su intento de mantener una imagen más controlada del campeonato.

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