McLaren duda de su ventaja real

El Gran Premio de Arabia Saudita dejó una imagen menos clara de lo que se pensaba sobre el dominio de McLaren en esta temporada de Fórmula 1. Aunque Oscar Piastri volvió a subirse a lo más alto del podio y amplió su ventaja en el campeonato de pilotos, las declaraciones posteriores de los protagonistas encendieron las alarmas en Woking. Tanto el australiano como su compañero Lando Norris reconocieron que Red Bull, y en particular Max Verstappen, estuvo más cerca de lo previsto. La penalización de cinco segundos que recibió el neerlandés fue lo que finalmente inclinó la balanza a favor de McLaren, pero el rendimiento del RB20 dejó claro que el equipo austriaco aún tiene mucho que decir en la pelea por el título.

Piastri fue sincero al describir lo exigente que fue la victoria en Jeddah. Desde la salida, que calificó como complicada, hasta el final del primer stint detrás de Verstappen, el piloto australiano tuvo que mantenerse alerta y sin margen para errores. Cuando finalmente tuvo pista libre, pudo encontrar su ritmo, pero nunca logró relajarse del todo. La presión constante de Verstappen lo obligó a mantener el pie en el acelerador y gestionar cada vuelta con precisión. La victoria, más allá de los puntos que aporta, sirvió como una advertencia: Red Bull todavía puede ser una amenaza real, sobre todo en circuitos como este, donde sus puntos fuertes salen a relucir.

Lando Norris, que terminó cuarto, fue aún más directo. Según el británico, la narrativa que coloca a McLaren como el equipo dominante no refleja del todo la realidad. A su entender, Red Bull sigue siendo igual de competitivo en clasificación y en carrera. Lo que sucede, explicó, es que McLaren suele mostrar más en los entrenamientos, lo cual genera una percepción errónea de superioridad. Norris no dudó en afirmar que Verstappen fue el piloto más rápido en Arabia Saudita, una opinión que contrasta con la euforia que envuelve al equipo inglés tras un inicio de temporada muy sólido. Esas palabras dejan claro que, internamente, McLaren no da por sentada su ventaja.

El análisis de Piastri fue en la misma línea, aunque más matizado. Reconoció que el coche sigue siendo fuerte, pero también apuntó que ciertos trazados, como el de Jeddah o el de Suzuka, parecen adaptarse mejor al Red Bull. En ambos circuitos, Verstappen estuvo más cerca de los McLaren, lo que sugiere que las diferencias de rendimiento pueden depender en buena medida del tipo de pista. Piastri dejó entrever que, aunque la ventaja sigue estando de su lado, no es tan amplia ni tan sólida como algunos podrían pensar. La sorpresa que se llevó con el ritmo de Verstappen durante el stint medio lo dejó claro: aún hay aspectos que deben afinar si quieren consolidar su posición de liderazgo.

Lo que queda tras la carrera es un escenario menos definido de lo que los números indican. McLaren lidera en puntos, pero no puede bajar la guardia. Red Bull, pese a los rumores de crisis interna y a las especulaciones sobre el futuro de su piloto estrella, demostró que puede plantar cara en las condiciones adecuadas. La temporada todavía es larga, y si algo dejaron ver las calles de Jeddah, es que el campeonato podría estar más abierto de lo que muchos imaginaban. McLaren deberá seguir mejorando si quiere mantener su ventaja, mientras Red Bull afila sus herramientas con la vista puesta en una recuperación que, por momentos, ya parece en marcha.