Sainz y Checo protagonizaron el único incidente de la carrera

La FIA ha clasificado como un incidente de carrera el choque entre Carlos Sainz y Checo Pérez durante el Gran Premio de Azerbaiyán, disputado ayer en Bakú. El incidente ocurrió en la penúltima vuelta, cuando ambos pilotos estaban inmersos en una intensa lucha por los primeros puestos.

Durante la carrera, Oscar Piastri, Charles Leclerc y Pérez estuvieron batallando por la victoria. Piastri, en la vuelta 19, logró realizar una maniobra decisiva que lo puso por delante de Leclerc para tomar el liderazgo. Aunque Leclerc trató de recuperar la posición usando el DRS en la larga recta de Bakú, sus esfuerzos no fueron suficientes. Checo Pérez también se unió al intento, pegándose al rebufo de Leclerc, pero tampoco pudo adelantar al monegasco.

La situación se complicó cuando Carlos Sainz, con un mejor ritmo de carrera, alcanzó a Pérez. En la penúltima vuelta, Sainz logró adelantar a Checo, y en su intento por pegarse al rebufo de Leclerc y superarlo, colisionó con Pérez, quien trataba de recuperar la posición que había perdido momentos antes.

Este choque posiblemente impidió que tanto Sainz como Pérez pudieran superar a Leclerc, quien estaba teniendo dificultades con el desgaste de sus neumáticos en los últimos compases de la carrera. De no haber ocurrido el incidente, ambos pilotos podrían haber tenido una oportunidad de podio.

Finalmente, el podio lo completaron Oscar Piastri, Charles Leclerc y George Russell, dejando a Sainz y Pérez sin opciones de sumar puntos importantes en las posiciones de podio. El incidente, sin embargo, permitió que Franco Colapinto de Williams sumara 4 puntos, y Oliver Bearman también consiguió puntuar para Haas, en una carrera en la que sustituía a Kevin Magnussen, quien estaba suspendido por acumulación de puntos en su licencia de la FIA.

El desenlace de la carrera fue un claro recordatorio de lo impredecible que puede ser la Fórmula 1, donde un incidente puede cambiar por completo el curso del resultado final.